Una figura diminuta descalza al borde del acantilado, una melena pelirroja que se levanta con las ráfagas de viento, un vestido blanco hasta los tobillos… así es la niña la primera vez que Grania Ryan la ve.»Si le digo algo podría asustarse y caer, pero igualmente la podría arrastrar el viento», piensa Grania que se ha refugiado en la casa de sus padres en Irlanda después de que la relación con su novio en Nueva York haya terminado. Allí entablará una íntima amistad con la niña, Aurora Lisle, y su padre, viudo. Sin embargo, esta inesperada amistad se topará con un imprevisto: un resentimiento profundo entre las dos familias de cuyo origen nadie quiere hablar.
Lo que más me gustó de este libro fue la sensación que inquietud que me dejó después de leerlo. Sentir el corazón sobrecogido me hizo preguntarme como ese final era tan perfecto a pesar de ser tan sorprendente. A diferencia de El secreto de la Orquídea libro de la misma autora que es completamente previsible, (aunque también merece la pena leer), este es un libro que te va sorprendiendo a cada paso. Si te gustan los libros con misterios y sobre relaciones humanas, con saltos en el tiempo entonces este libro te gustará tanto como a mi. ¿ A ti que tipo de finales te gustan más?
Entre libros anda el juego 
Un comentario en “La Joven del Acantilado”